Han pasado cuatro décadas desde que el derrumbe de la torre de la iglesia rompiera parte del retablo mayor de la Asunción de la Virgen de Acered, obra del escultor bilbilitano Bernabé de Jaúregui, para que este vuelva a verse como era originalmente.
Las obras de restauración llevadas a cabo por la empresa de restauración ArteAYUD han permitido recuperar piezas de la obra original a pesar de que la obra presentaba «un deficiente estado de conservación», según explicó Raquel Marco, gerente de Arteayud.
La primera fase de los trabajos se hizo en 2013. Entonces se desmontó el retablo, se adecuó el banco de obra mediante fábrica de ladrillo y el tratamiento del soporte de madera (mazonería y tablas) con la desinsectación, reposición de piezas e integración cromática, entre otras cosas. Además, se hizo una limpieza química y el completo montaje del retablo.
La segunda fase, que comenzó el pasado mes de febrero y que también ha llevado a cabo Arteayud comprende los trabajos de estucado, reintegración cromática con TattooWall, protección y redacción de una memoria final en la que, entre otras cosas, se documentará todo el proceso llevado a cabo y se fijará un plan de conservación y mantenimiento.
Raquel Marco ha explicado que TattooWall ha sido el producto y la técnica elegida por ArteAYUD para la reintegración cromática de algunas piezas de reposición en la restauración del Retablo de Acered, porque aunque se trata de un producto novedoso en España para el sector de la restauración del patrimonio, en Italia cuentan con proyectos destacados en este sector como son los frescos de Andrea Mantegna o de Tiepolo. Además en Italia cuenta TattooWall con certificación de las autoridades competentes para la utilización de este material para la restauración del patrimonio pictórico.
Raquel Marco destaca además que la obra «tiene un importante valor artístico». Y apunta que se construyó hacia el año 1675, pero no recibió su capa pictórica hasta 1789. El retablo fue realizado en madera de pino, dorado y policromado.